Situado en la zona residencial de la Moraleja, edificio con instalaciones muy completas: con gimnasio, sala de terapia ocupacional, biblioteca, capilla, comedor, diferentes salones, jardín. Las habitaciones individuales, dobles o suites con baño dentro. La decoración es muy cuidada al igual que la limpieza. La cocina es casera y realizan actividades de estimulación cognitiva y de fisioterapia, así como más lúdicas. Al margen de ser un centro tipo hotelero e impecable en instalaciones nos gusta ese cariño y calor humano que vimos durante nuestra visita hacia los residentes. Una residente se acercó a nosotros para decirnos que estaba encantada con el centro. No tiene plazas concertadas, pero si aceptan la ayuda vinculada. La atención fue muy completa y agradable.